
Lo que vas a encontrar
Neurofeedback es una intervención terapéutica que está en auge por las mejorías que han mostrado los pacientes con diferentes problemáticas. Este tratamiento consiste en el aprendizaje paulatino, basado en la retroalimentación para lograr en los pacientes un mejor manejo de sus ondas cerebrales.
Los estudios se han centrado en mayor medida en casos relacionados con el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad -TDAH-, por consiguiente, en este artículo revisaremos qué es Neurofeedback, en qué consiste y cuál es su efectividad en pacientes con TDAH.
¿Qué es Neurofeedback?
Neurofeedback es una técnica basada en la neuro-retroalimentación. Utilizando un software y un electroencefalograma, la persona recibe la información de la actividad eléctrica de ciertas zonas de su estructura cerebral, haciéndolo consciente de la forma en que trabajan sus ondas cerebrales y cómo estas se relacionan con su sensaciones, pensamientos o comportamientos. Con el tiempo la persona puede regular, mejorar y modificar la forma en que trabaja su cerebro, dado que logra comprender su desempeño cuando está bajo presión, frustrado o efusivo; a su vez puede trabajar en procesos cognitivos que desee potenciar o que presenten algún nivel de compromiso.
Todo esto se trabaja con señales electrofisiológicas generadas por las ondas cerebrales, las cuales varían tanto en frecuencia (número de repeticiones por unidad de tiempo) como en amplitud (variación de desplazamiento en el tiempo). Las mismas, van a dilucidar cuáles son las ondas que están predominando en un momento determinado, ya sean ondas lentas, intermedias o rápidas. Las ondas lentas son llamadas Delta y Theta, predominantes en los primeros estados de sueño y sueño profundo, usualmente no están (o no deberían estar) tan presentes en el día, especialmente si se está realizando alguna actividad. Se denominan intermedias a las ondas Alfa, SMR y Beta1, siendo su participación más activa en el día, dado que influyen en la relajación, atención y resolución de problemas. Finalmente se denomina, entre las ondas rápidas, a la onda Beta2 que se encarga de las respuestas rápidas frente a situaciones de peligro o altos niveles de ansiedad.
En la realidad esta distribución de velocidades resulta más compleja, dado que dentro del día también se destinan algunos periodos a trabajar en ondas lentas o rápidas, lo que resulta eficiente si se piensa en optimizar recursos. Por ejemplo, pueden predominar las ondas lentas en las horas de almuerzo o en el recreo, pues el entrar en estado de reposo le permite a la persona ahorrar recursos que se pueden destinar a actividades que requieren de un gasto mayor de energía mayor. Otro ejemplo referente a las velocidades más rápidas, es el caso donde se debe hacer la entrega de algún documento de manera inmediata, en esta situación la persona necesita entrar en estado de alerta y concentración. Es por esto por lo que excesos de alguna de las velocidades en el momento incorrecto puede generar insomnio, hipersomnia, fallos en la atención, olvido de la información, ansiedad, depresión e incluso percepciones negativas sobre sí mismo.
Por ende, es importante aclarar que los diferentes tipos de onda no se deben considerar malos o buenos, porque cada uno cumple una función importante en nuestro funcionamiento, simplemente el desempeño que tenemos actualmente viene de aprendizajes adquiridos previamente. Desde ahí la necesidad de trabajar desde Neurofeedback, pues permite visibilizar las ondas cerebrales, siendo esta una herramienta que le facilita a las personas optimizar sus recursos y, de ser el caso, modificarlos.
¿Cómo se trabaja en Neurofeedback?
Como se venía mencionando, Neurofeedback hace uso de señales electrofisiológicas. Para explicar mejor su funcionamiento es importante aclarar que las neuronas tienen por labor tramitar la información y, para lograr ese objetivo se conectan entre ellas usando la electricidad como propulsor para enviar los mensajes de una a otra. Así, generan una red que les permite vincularse con las diferentes zonas cerebrales. Esta dinámica es registrada por los electrodos posicionados en el cuero cabelludo, los cuales envían la información obtenida de la corriente eléctrica neuronal al software, que transforma esas señales en información digital para ser presentada a la persona en gráficas, videos y sonidos, todo esto en tiempo real, retroalimentando a la persona constantemente sobre su funcionamiento.
La anterior imagen muestra el proceso de retroalimentación mediante Neurofeedback, muestra el registro de las señales eléctricas, su análisis en tiempo real y finalmente como se transforma esas señales en información digital a fin de retroalimentar a la persona. Diagrama tomado de Postigo Rodrigo, P, 2017.
Esto genera un aprendizaje asociativo, denominado condicionamiento operante, que utiliza la retroalimentación como una contingencia (positiva o negativa) frente a las respuestas que esté emitiendo, sea para aumentar su incidencia o disminuir su ocurrencia. En Neurofeedback se usan el video y el sonido como reforzador o inhibidor, pues avanzan o se detienen dependiendo de si la persona logra o no los objetivos de los ejercicios en la pantalla planteados cada sesión. Así, se instruye al cerebro a que asocie que, si el sonido y el video avanzan, se está haciendo un trabajo cerebral adecuado y, por el contrario, si se detienen, indica que se desestabilizó su funcionamiento. Con la práctica constante, se espera que la persona logre desarrollar diferentes grados de control, al punto de influir en sus ondas cerebrales y modificarlas de manera intencional.
Por consiguiente, el entrenamiento le permitirá a la persona aprender a regular aspectos concretos de la actividad eléctrica cerebral que haya sido establecido como ruta de trabajo, restaurando y/o modificando la magnitud y distribución tanto de las bandas de frecuencia como de amplitud, esto en aras de mejorar el funcionamiento cerebral, que a su vez impactará en el desempeño cognitivo y en el manejo emocional.
¿Cuál es su efectividad en pacientes con TDAH?
Neurofeedback es una de las herramientas que se utilizan para trabajar desde el área de psicología clínica, neuropsicología y neuropsiquiatría, dado que permite evaluar el funcionamiento cerebral y establecer una ruta de trabajo personalizada, es decir, ajustada a la necesidad de cada paciente, pero ¿es Neurofeedback realmente efectivo en paciente con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad?
TDAH es una de las problemáticas más diagnosticadas en niños, se caracteriza por provocar grados variables de inatención, hiperactividad e impulsividad. Los estudios indican que en la mayoría de los niños con este diagnóstico presentan predominancia de ondas lentas, que, al no ser las ondas adecuadas para el funcionamiento cerebral en vigilia, terminan imposibilitando al niño para responder a las demandas planteadas por el entorno. En estos casos el niño distribuye su atención entre una variedad muy amplia y fluctuante de estímulos diferentes, por ende, le cuesta regular su conducta motora. Si esta condición no se atiende y controla a tiempo, puede desencadenar algunos problemas en aprendizaje, y por esto los niños con TDAH tienen mayor probabilidad de perder un año escolar u obtener calificaciones inferiores a sus capacidades cognitivas.
Con Neurofeedback los pacientes presentan mejorías conductuales, evidencian un aumento en la atención, disminuyen la inquietud motora e hiperactividad y, consecuentemente, presentan beneficios en el aprendizaje y en la relación con sus pares e incluso con sus figuras de autoridad. Cabe aclarar que, en los menores, se recomienda un trabajo conjunto con familia e institución educativa para reforzar el trabajo realizado en las sesiones de Neurofeedback, de manera que el niño trabaje con coherencia en pautas y criterios en todos sus ámbitos desempeño.
Se puede concluir entonces que Neurofeedback ha surgido como una alternativa distinta a las intervenciones tradicionales, dado que el TDAH se maneja habitualmente desde la farmacología o desde la terapia conductual, y aunque la farmacología puede ser más efectiva a corto plazo, Neurofeedback, al ser un entrenamiento que permite aumentar los niveles y periodos de atención, y reducir la hiperactividad e impulsividad, a largo plazo genera mejores resultados.
Bibliografía
Gaviria Loaiza, J., Calderón Delgado, L. A., & Barrera Valencia, M. A. (2014). ¿Es efectivo el entrenamiento en Neurofeedback para el tratamiento del TDAH? Resultados a partir de una revisión sistemática.
Hernández, E. D. (2015). Neurofeedback como tratamiento para el Trastorno por Déficit de Atención (TDA) (Doctoral dissertation, Universidad Complutense de Madrid).
Matich, D. J. (2001). Redes Neuronales: Conceptos básicos y aplicaciones. Universidad Tecnológica Nacional, México.Postigo Rodrigo, P. (2017). Estudio electrofisiológico de los niveles de activación cerebral y conectividad funcional, potenciados mediante la técnica de Neurofeedback durante una tarea atencional.